Wálter Nosiglia fue entrevistado por DIEZ a falta de la última etapa para el final de la competencia más dura del mundo tuerca. El piloto boliviano manifestó sentirse feliz por haber dado todo de sí en el rally Dakar, y también dejó en claro que le da igual subir o no al podio. Está contento con lo conseguido.
Luego de terminar como tercero en la clasificación general por tres etapas consecutivas, el chuquisaqueño manifestó estar bien, pese a los dolores en sus costillas (tiene una quebrada y otra fisurada), y que falta poco para la conclusión de la competencia.
Cansado, con muestras de dolor en el rostro, pero siempre con un buen humor para atender a los demás, así estaba Nosiglia en el tramo que se corrió desde Termas de Río Hondo hasta Rosario.
"He tenido muchos problemas a lo largo de toda la competencia, terminé sin GPS varias etapas, tuve que cambiar el tanque de gasolina de mi 'cuadra' con el de mi mochilero y un montón de cosas más", relató el piloto de 54 años, que destaca por el estado atlético que tiene su cuerpo.
Para el crédito boliviano todo lo conseguido hasta el momento es destacado y espera poder compartir con la gente que llegue hasta la meta en el Parque Tecnópolis de Buenos Aires. No le interesa si termina subiendo al podio, es consciente de todo lo que ha dado y también la diferencia en tiempo que existe entre los dos primeros (Sonik y Gonzalez Ferioli).
El 'Lobo del desierto', como lo llaman algunos, o 'Chuck Norris', como lo mencionan otros, terminará el Dakar como uno de los mejores pilotos del mundo en su categoría, logrando algo histórico para un país que participa por segunda vez en la organización del máximo evento automovilístico del mundo.
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