Sin embargo, en 2008 el raid dejó África como consecuencia de los conflictos armados de la región. Todo se inició con el asesinato de cuatro franceses y tres militares mauritanos días antes de la largada. Producto de este hecho, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia recomendó cancelar la prueba. Es así como llegó a Sudamérica en 2009 y aquí se ha quedado.
Antes, en 1991, el francés Charles Cabannes (auxilio del equipo de camiones de Citroën) había perdido la vida producto de un disparo cuando se disputaba la octava etapa de la carrera. Si bien ninguna agrupación terrorista reivindicó el hecho, se presume que éste fue consecuencia de los enfrentamientos entre las fuerzas armadas de Malí y los rebeldes Touareg.
Por séptimo año consecutivo el Rally-raid más importante y exigente del mundo, el Dakar, se corrió en suelo sudamericano.
DESIERTO DE SAL
“Sin duda fueron las escenas más impresionantes que se han visto y vivido en el Dakar. Rodar a fondo por el singular y espectacular Salar de Uyuni en Bolivia fue todo un espectáculo”, apunta el diario elconfidencial.com.
3.660 de altitud. Diez mil metros cuadrados del mar de sal más grande del mundo. El pasado lunes 12 de enero, los pilotos de motos afrontaban la segunda y demoledora parte de la etapa maratón en la que no podían contar con asistencia mecánica, apunta el reportaje de este portal.
Además, agrega, la temperatura bajó ostensiblemente y con lluvia.
Situado en el suroeste de Bolivia, el Salar de Uyuni es el vestigio de un enorme lago prehistórico. Tiene unas once capas de sal, con espesores que varían por debajo del metro y hasta los diez, con una gruesa costra en la superficie. Cuando está ligeramente cubierto de agua, especialmente entre enero y marzo, refleja de forma espectacular el cielo. Fue también el dramático caso del pasado lunes.
63 MUERTES
Con la muerte del motociclista polaco Michal Hernik (2015), la competencia del Dakar sumó su víctima número 63 en sus 36 años de historia.
De ellos, 24 son pilotos y copilotos y el resto espectadores, periodistas, asistentes y transeúntes ajenos a la carrera.
El motociclista Patrick Dodin fue la primera víctima mortal de la carrera. Perdió la vida en 1979 tras salirse de la pista en Agadés (Níger). El año más luctuoso fue 1986, edición en la que murieron siete personas.
El piloto Jorge Martínez Boero, se convirtió horas después de la largada de 2012 en el primer corredor argentino muerto del Dakar.
Otros dos argentinos fallecieron durante el paso del Dakar por ese país: Alejandra Sonia Escudero, espectadora cordobesa en Alpa Corral en 2010, y Marcelo Reales, un trabajador rural en Tinogasta, en 2011. Hace dos años murieron dos personas que viajaban en un auto colectivo en el sur de Perú, en un choque con un auto de asistencia del Dakar.
Entre los 63 muertos en la historia de esta carrera figura el creador del París-Dakar, el francés Thierry Sabine, quien falleció al caer el helicóptero en que sobrevolaba la competencia en Malí en 1986.
DESHIDRATACIÓN
Desde que la prueba se instaló en Sudamérica (2009) han perdido la vida cinco pilotos, contando al polaco Michal Hernik (2015), que murió por deshidratación.
De hecho, la muerte de Hernik se produjo por causas muy poco explicables, ya que al ser encontrado no presentaba rastros de haberse accidentado; es más, y tal como les ha ocurrido a muchísimos pilotos, incluido a "Chaleco" López, los corredores se pierden, se deshidratan producto del calor perdiendo noción del tiempo y el espacio. Hernik no alcanzó a recibir ayuda y su cuerpo fue encontrado por el helicóptero médico.
Algo similar y extraño le ocurrió al belga Eric Palante, quien fue encontrado muerto junto a su moto. La autopsia, según informaciones de la época, arrojó "causas naturales", ya que no había evidencia física traumática.
El caso del francés Pascal Terry (2009) también llama la atención. Fue hallado muerto entre unos pastizales en un lugar de difícil acceso cerca de Santa Rosa en Argentina. Los reportes señalan que se había sacado el casco antes de sentarse junto a un árbol buscando la sombra. Posteriormente, la autopsia arrojó muerte por un paro cardiorrespiratorio producto de un edema pulmonar.
El francés Bourgin y el argentino Jorge Martínez fallecieron por accidentes. El primero chocó contra una patrulla de Carabineros en 2013. Un año antes Martínez murió por las múltiples fracturas que le dejó una fuerte caída.
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