El primer potosino en culminar el Rally Dakar, Orlando Careaga, acogió ayer el cariño de la Villa Imperial. El piloto de autos fue aclamado por la población mientras recorrió las calles del centro de la ciudad y recibió distinciones de las autoridades.
Tres días después de completar la competencia más peligrosa del planeta, el corredor potosino retornó a su ciudad, procedente de Santa Cruz. Encima de una camioneta y tomando con una mano la bandera potosina, transitó por varias calles, donde centenares de aficionados aplaudieron su paso.
En un acto especial, en el frontis de la Alcaldía potosina, el burgomaestre de la ciudad, Williams Cervantes, entregó la medalla “Vale un Potosí” a Careaga, que también recibió reconocimientos del Gobierno Departamental y otras entidades.
Con guirnaldas y el casco de minero, el piloto disfrutó del caluroso recibimiento, bailando la tradicional cueca potosina. Después, agradeció el apoyo de las autoridades y pidió que el Dakar “llegue a Potosí, porque la gente se lo merece”.
“Hemos llegado sin motor, hemos sido jalados por un camión más de 700 kilómetros, hemos pasado momentos duros pero siempre acordándonos de todo el impulso que nos ha dado la gente, de todos esos momentos en territorio potosino y boliviano”, comentó el piloto, que también adelantó que participará en la próxima edición.
En su primera participación, Careaga concluyó el Rally Dakar 2017 en el puesto 48 de la clasificación general de autos, luego de tener varias complicaciones durante la primera parte de la competencia.
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