Con el brazo derecho en alto y la canción de Queen We are the champions (devenida en el típico “himno a los campeones”) de fondo, don Simón agitaba la bandera de Cochabamba y ponía la imagen final.
La hacía flamear ante los seguidores de su hijo, que divisaban el espectáculo íntimo (hecho público) en un encuentro que contó con banda en vivo, una colecta organizada por cristianos y un trofeo que simplificó una hazaña en particular: la de Danny Nogales, el “piloto del pueblo”.
Fue precisamente aquel hombre el centro del acto especial. Danny, el corredor de motos que compitió en el Rally Dakar 2017 sin asistencia mecánica, fue ovacionado en la Plaza de las Banderas tras tamaña travesía internacional.
Sus fans y familiares lo siguieron en una caravana que arrancó luego de las 16:00, en la tranca de Suticollo, y que concluyó en el centro valluno, alrededor de las 18:30.
En la plaza estaban sus padres Silvia y Simón, la pareja que lo apoyó desde que en 2016 el “llanero solitario” decidió sumar su nombre en la carrera más peligrosa del Planeta.
Don Simón, el mismo que aguantó más de dos semanas de viaje junto a su hijo, de etapa en etapa, de enlace en enlace, es quien fue sorprendido ayer.
En mitad del acto de recepción, el vinteño paró la música y comunicó su decisión de regalarle su medalla del Dakar a su papá: “Quiero entregársela a una persona muy especial. Si no hubiera sido por él, este sueño no se habría cumplido. Quiero dársela a mi papá, mi impulso. Sé que él lo pasó duro, igual que yo ¡Que Dios te bendiga, papi!”.
Al ritmo de la banda, un grupo de amigos de la Iglesia Adventista del Séptimo Día comenzó a pasar unas latas para recaudar dinero a favor de Danny. Una de las organizadoras de la iniciativa fue Madaí, la mujer que mantiene una relación amorosa con el corredor.
La ceremonia, en la que las hermanas del motociclista de KTM repartieron jugos y sandwiches a los presentes, fue celebrada en la Plaza de las Banderas por petición de la Alcaldía de Cercado, que colaboró con 31.654 bolivianos en los días pasados.
“NUNCA MÁS ESTARÁS SOLO” El secretario de Desarrollo Humano del Municipio, Andrés Cuevas, garantizó una futura colaboración para el competidor. Con el eslogan improvisado “Nunca más Danny Nogales estará solo”, el funcionario adelantó que la Alcaldía se compromete en asistirlo en todo sentido.
“Si decides volver a participar en el Dakar, pues el Gobierno Municipal también te acompañará y estará contigo cada segundo”.
Y es que, de momento, la participación de Nogales en el raid de 2018 es incierto. Todo dependerá de las “gestiones que realice” y de la predisposición que muestren las autoridades con respecto a ayudarlo económicamente.
“No quiero adelantarme a nada. Primero voy a hacer las gestiones necesarias. Tocaré puertas y veré los compromisos del Gobierno. El Vicepresidente (Álvaro García Linera) dijo que no volveré a correr en estas condiciones. Espero que se cumpla todo eso.”
“Quiero conocer a la tupiceña”
Silvia Copa, madre de Danny Nogales, está decidida a conocer a la vendedora de jugos tupiceña que ayudó a su hijo y le pagó la gasolina durante el Dakar.
Luego de que en las redes sociales se masificara las imágenes en las que se ve al “llanero solitario” junto a María Huanca, el país entero conoció el gesto solidario.
“Aún quiero conocer a la señora que colaboró con el llenado del tanque. Le dije a Danny que me lleve”.
Por su parte, Madaí Herrera, enamorada del vinteño, contó que acompaña al piloto hace poco más de seis meses, tiempo en el que se conocieron.
“Todo este tiempo estuvimos trabajando para que pudiera ir bien preparado físicamente”, relató.
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