Hasta el término de la séptima etapa del rally, ambos lideran la clasificación general en cuatriciclos y, a medida que avanza la competencia, también aumenta la rivalidad por quedarse en el primer lugar.
Hasta el tercer día de competencia, ninguno figuraba en las primeras posiciones, pero tras la séptima etapa todo cambió: Alejandro es el puntero y Marcos es el exclusivo escolta.
Sin presiones. Pese a la auspiciosa realidad, los pilotos de Yamaha no se vuelven locos y aseguran que las bajas de Ignacio Casale y Sonik no les mete presión para el título.
"No encaramos esta carrera con obligaciones. Estamos corriendo por pasión, vinimos a pasarlo bien. Estamos disfrutando", sentenció Marcos.
Sobre el abandono del competidor chileno, Alejandro lamentó su baja y aseguró que "así es esto, esos son los riesgos de participar en el Dakar".
Finalmente, los dos hermanos mostraron su interés para que la carrera vuelva a disputarse en Chile, país al que podrían retornar como los dos mejores pilotos de la serie. Solo seis etapas restan para que los transandinos terminen arriba y su receta parece ser la distensión y relajo.
Estrecha diferencia. Alejandro encabeza la lista de pilotos en cuatriciclos y Marcos ocupa el segundo lugar, pero con una diferencia de solo 4 minutos y 39 segundos.
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