Como de costumbre el Dakar se iniciará con el Village, que se lleva a cabo durante tres días antes de la largada oficial. En esta ocasión, el lugar del show inicial de la versión 2018 del rally, a correrse del 6 al 20 de enero, será el Cuartel General del Ejército del Perú (San Borja, Lima), más conocido como Pentagonito, y que se estima tenga la visita de más de un millón de espectadores.
La expectativa por ingresar al lugar, que es un espacio de varias hectáreas, es enorme, pues los fanáticos pueden tener la chance de estar cerca de sus ídolos y de las máquinas, que en algunos casos son de ensueño pues su costo supera el millón de dólares. Allí no hay tantos obstáculos para las selfies, que permite llevarse un buen recuerdo. A ello se suma el hecho de que el ingreso en esta ocasión es gratuito.
Las danzas típicas durante las tres jornadas se muestran a cada momento y las degustaciones de alimentos y bebidas son una manera de dar a conocer lo mejor del país sede de la largada del Dakar. Ya se anuncia que no faltará el pisco peruano, que es una denominación de origen que se reserva a la bebida alcohólica, aguardiente de uvas que se produce en el Perú desde finales del siglo XVI. En lo que se refiere a la gastronomía, los peruanos también pretenden lucirse.
Los pilotos también disfrutan del Villaje del Dakar pues es donde se lleva a cabo la revisión técnica y administrativa, donde las máquinas deben superar las exigencias para no sacar ventaja con los rivales. Los competidores, además, tienen un examen previo, que por lo general se convierte en los primeros aplausos de los fanáticos.
La expectativa en tierra peruana ha venido creciendo y como una muestra de lo que habrá en 2018 se toma las dos versiones del Dakar que pasaron por tierra peruana, la de 2012 y la de 2013. En esas dos ocasiones los fanáticos formaron interminables cadenas humanas en las carreteras, que son zonas de enlaces, y en los lugares de carrera era una locura. El trato sorprendió pues hasta los equipos de apoyo fueron frenados en la ruta para firmar autógrafos.
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Las empresas que apoyan la realización del Dakar y a los pilotos también apuestan a lucirse en el Village, con varios espectáculos con la participación del público, además de sorteos y premios. Por esta razón los visitantes se quedan varias horas en el lugar, que abre sus puertas durante al menos 12 horas por día.
Tampoco faltan los ciudadanos con banderas de diferentes países, como ha sucedido con los bolivianos que hacen sentir su presencia y cariño con los competidores nacionales.
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