martes, 19 de diciembre de 2017

Danny juega últimas fichas por un mecánico

Danny Nogales, el vinteño que se ganó el mote de Llanero Solitario por correr en el Rally Dakar sin más ayuda que la de su padre y su hermano, ya no se siente tan solo.

El piloto fue nombrado ayer por la Alcaldía de Cercado como el Embajador de Cochabamba Sorprendente en la competencia dakariana. En la ocasión festiva, el motociclista confesó que se inscribió en la categoría maratón. Sin embargo, se jugará sus últimas cartas para conseguir el apoyo de un equipo de asistencia. Viajará el 30 de este mes a Lima, capital de Perú y punto de partida de la travesía internacional.

Allí tratará de persuadir a algún team para que le facilite los servicios necesarios, pues Danny descartó por completo la idea de viajar desde Cochabamba con un mecánico y vehículo de auxilio propios.

“Solo nos queda esperar lo que podamos conversar para llegar a un acuerdo con alguna empresa. Si es que nos abren las puertas, estaremos entrando con mecánico. De lo contrario, en la especialidad de maratón”.

QHOCHALA, COMO EL CHOCLO Y EL MOTE La de ayer fue una jornada especial para el vinteño, de 34 años. El alcalde José María Leyes lo recibió en sus oficinas y lo distinguió con un certificado simbólico que convierte ahora al corredor en la cara visible de la Llajta en el raid.

En el encuentro, Leyes le auguró éxito en la competencia, lo abrazó, resaltó su “valentía” por enfrentar la contienda más dura del planeta y mencionó que Danny es un qhochala con todas las letras.

“Permíteme hacerte entrega de este nombramiento a cargo de la Alcaldía y del pueblo, para que como buen qhochala, criado con mote, choclo, quirquiña, papahuayco y llajuita, nos llenes de orgullo”.

Danny correspondió con gratitud.

En una nota con este medio, agregó que la distinción incluye un monto económico que lo “alivia”, aunque no ahondó en detalles numéricos.

De forma preliminar, el vinteño sabe que el recorrido en los tres países (Perú, Bolivia y Argentina) supondrá un gasto significativo. Mucho más en la nación incaica, donde la logística será mayor que en los dominios locales.

“Estamos bastante justos con la inversión”, reconoció el Piloto del Pueblo, que, hasta el momento, ha gastado más de 120 mil dólares.

También es consciente de que el cambio climático (de la altura al llano y viceversa) podrá representar un obstáculo para el que debe estar preparado.

“El Dakar vuelve a sus raíces, el desierto. La dureza se viene ahí. El cambio de clima, de subir del nivel del mar a más de 4 mil metros, va a ser rotundo”.

1 aspecto más trabajado

Danny Nogales ha enfatizado en lo que refiere a la navegación, aspecto en el que suelen tropezar los pilotos en el Dakar.

“Vamos muy bien. Hemos aprendido mucho más en desierto. Es lo que profundizamos”.



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