viernes, 2 de enero de 2015

Los autos vienen por primera vez



La segunda vez de Bolivia en el Dakar será diferente a la primera corrida el año pasado, pues la novedad será el ingreso de los autos, mientras que repetirán las motos y los cuadriciclos. También hubo modificaciones en el trazado, pues los bólidos ingresarán y saldrán por Chile y en esta edición está en planes cruzar por medio del salar de Uyuni, si las condiciones climáticas —si no llueve mucho— así lo permiten.

Serán tres días de la competencia en el país en dos etapas: el sábado 10 de enero ingresarán los autos desde Iquique, mientras que motos y cuadriciclos tendrán descanso en esa ciudad chilena. Los camiones, que no vendrán a Bolivia, afrontarán ese día un recorrido por una ruta diferente por el Desierto de Atacama.

El domingo 11, será el turno de la visita de motos y cuadriciclos, mientras que los autos regresarán a Iquique. Para esa jornada “doble”, la organización tuvo el cuidado de elaborar rutas diferentes, una de entrada y otra de salida, a fin de que no se crucen.

Bolivia ya pudo ver en 2014 de cerca a las estrellas del motociclismo. Ahora será el turno también de los automovilistas.

Entre las principales figuras de autos que se espera entren a territorio boliviano están el español Nani Roma, ganador del año pasado. Encabeza el equipo Mini de nueve tripulantes en el que también se destaca el príncipe catarí Nasser al Attiyah. La marca se impuso en las tres últimas ediciones.

Peugeot vuelve en 2015 al raid y en sus filas tendrá a los franceses Stéphane Peterhansel y Cyril Despres —quien debutará en la categoría de autos— y al español Carlos Sainz.

En el caso de las motos, el también español Marc Coma es el gran favorito con su moto KTM, misma marca en la que competirá el boliviano Juan Carlos Salvatierra, una de nuestras cartas en la competencia.

El 19 de noviembre, en París, fue presentada la carrera, y el ministro de la Presidencia de Bolivia, Juan Ramón Quintana —presente en ese evento en la capital francesa— dio algunos detalles del recorrido por el país, según remitió la Amaury Sport Organisation (ASO), organizadora de la prueba.

La población orureña de Pisiga será la puerta de llegada al país. De ahí, los pilotos seguirán hacia el sur para conectarse con Corque, pasarán por un corredor hasta Belén de Andamarca y seguirán hasta Uyuni, donde estará la meta. Serán en total 717 kilómetros (396 de enlace y 321 de especial).

El regreso tendrá el mismo kilometraje, pero otra ruta: saldrán de Uyuni, irán por Salinas de Garci Mendoza, Llica, Tahua y Kolcha K, para volver a Iquique por Ollagüe.

En el caso de las motos, éstas llegarán el domingo 11 de enero utilizando el mismo trazado del día anterior, mientras que para el regreso previsto para el lunes 12 el kilometraje será mayor, según la ASO de 805 km (24 km de enlace y 781 km de especial).

Durante la presentación de la carrera, Etienne Lavigne, presidente de ASO, dijo en referencia a Bolivia: “Hemos ganado en experiencia, pero resultaba muy difícil acoger en Uyuni, a más de 3.600 metros de altura, a motos y coches al mismo tiempo. Hay problemas de seguridad que hay que tener en cuenta”, por eso se optó por desdoblar esa etapa en días diferentes.

Dentro del país sin ninguna asistencia

Las etapas en Bolivia serán maratón, o sea que los pilotos no podrán contar con ningún tipo de asistencia mecánica ni en el trayecto ni en los campamentos. Se trata de una dificultad adicional que la organización suma al ya complicado diseño que tiene la competencia más dura del planeta.

“Una etapa maratón lleva a una parte de los competidores a pasar la noche en un solitario vivac. Los vehículos se llevan a un parque cerrado, donde únicamente se autoriza la asistencia entre competidores. Aparte del desafío técnico que representa esta imposición, los pilotos viven también una experiencia diferente de buena convivencia. En Uyuni, primero son los equipajes de autos que deberán pasar una noche separados y al día siguiente, motos y cuadriciclos. La categoría camiones tendrá un bivouac totalmente reservado en pleno desierto de Atacama”, según la nota de la organización que describe esa parte de la competencia.

En Uyuni, el Regimiento Loa es el lugar elegido para el campamento, donde primero se instalarán los autos (sábado 10) y al día siguiente (domingo 11) las motos y cuadriciclos. En 2014, la capacidad de albergue fue para unas 300 personas, ahora se realizaron trabajos de ampliación, pues la cifra de visitantes se amplía con el ingreso de los vehículos.

Los autos y los caminones (éstos en un escenario diferente porque no ingresarán al país) volverán este año a las etapas maratón, ausentes desde 2005.“Es un nuevo reto para los competidores y para la organización. Los primeros irán por caminos diferentes y los segundos deberán coordinar todo en esos sitios”, dijo Etienne Lavigne.


No hay comentarios:

Publicar un comentario