El chaqueño histórico

Un chaqueño, piloto de motos, era hasta hace unos años un personaje con escasa relevancia. Pero ahora forma parte de la historia boliviana. Lo demostraron ayer miles de personas que coreaban su nombre cuando él ingresaba a Uyuni. Fabricio Fuentes se había convertido en un símbolo de unión, de satisfacción y de orgullo.

Frente al palco de honor nadie le prohibió llorar. Él trató de aguantarse pero al final no pudo. Y gritó con todas sus fuerzas que se sentía orgulloso de ser boliviano. El hecho de finalizar la séptima etapa del Dakar, con meta en Uyuni, era un motivo más que suficiente para emocionarse.

Fabricio Fuentes sufrió para llegar. La lluvia, el granizo y una quebrada que se llenó de agua le impidieron pasar, y junto a él estaban unos 27 competidores.

Al final, el piloto boliviano llegó a la meta en el puesto 52. Recorrió los 321 kilómetros entre Iquique y Uyuni en un tiempo de 5h55m02s, con una diferencia de 1h59m02s en relación al ganador, el portugués Paulo Concalves.

Agradecido. Fabricio Fuentes, antes de extenderle la mano al presidente Evo Morales y al vicepresidente Álvaro García Linera, les agradeció por hacer posible la realización de la competencia.

En la etapa de hoy, el único boliviano en categoría motos recorrerá los 784 kilómetros entre Uyuni e Iquique. Pasará por el Salar de Uyuni e iniciará una de las rutas más largas de la competencia, en la que se puede acelerar a fondo gracias a la llanura del Salar.