Hace ocho años, la vida del piloto dio un giro rotundo. Dutto competía en un certamen cuando sufrió un duro accidente. Antes del hecho, el peninsular reconocía sus miedos. Decía que se angustiaba de pensar en los casos de Alber Llovera e Isidre Esteve, insignes pilotos europeos que terminaron en sillas de ruedas. “Cuando estás dentro no tienes otra opción, o aceleras o renuncias”. La fractura en la séptima vértebra fue la que le provocó la pareplejia.
En 2012, Nicola Dutto se animó a competir en el Baja Aragón de España. “Me daban ganas de llorar, de reír, no imaginaba un apoyo de ese nivel en España. Estuvimos 15° de la absoluta, pero rompí un fusible y terminé 20°. Muchos me daban las felicitaciones, pero hubo uno que se molestó cuando lo adelantamos”, dijo.
En 2017, mientras Dutto competía en Marruecos, sostuvo que “cuando sufres una lesión así la vida te cambia radicalmente. Debes aprender a gestionar tu cuerpo lo último que pensaba era volver a subirme a la moto. Siempre pensé en mantenerme en el mundo del off road, pero organizando carreras o sobre las cuatro ruedas”.
Ahora, el plan de correr el Dakar lo viene alimentando desde hace un año y medio. “El problema de ir cuando caminaba era el presupuesto; podía decidir si gastar todo mi presupuesto en una carrera o hacer un campeonato”.
Con recursos y con el apoyo de KTM, Dutto tiene garantizada su presencia en Sudamérica. El motociclista no solo quiere ser el primer piloto parapléjico en iniciar un Dakar, sino también en terminarlo.
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