Del infierno de Sanandita al peligro del Dakar, el piloto chaqueño Fabricio Fuentes, en 2016 pretende terminar la competencia entre los 50 mejores y no abandonarla como en 2014. Del mal momento que pasó con su abandono (infierno) pretende llegar a la gloria. El piloto, que lleva siempre un sombrero chaqueño colgado del cuello, aún recuerda con nostalgia su caída en la que un camión aplastó su moto.
“La verdad es que el Dakar de mi debut fue negativo para mí. Me caí a baja velocidad en la quinta etapa, me levanté y un camión me atropelló la moto. No tuve un rasguño, pero la moto quedó destrozada. En ese momento se cayó el mundo para mí. A partir de entonces he realizado mucho entrenamiento: corrí todos los Dakar Series y salí 11° en el Desafío Inca en esas dunas espectaculares. Hice motocross para mejorar la navegación; fui varias veces a Iquique y a Fiambalá. Necesito esta vez terminar la carrera y creo que puedo estar entre los 50 mejores. Hay un enorme entusiasmo en Bolivia”, dijo el piloto.
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