"Después de un año tan bueno será difícil igualarlo o superarlo, pero estoy motivada, tengo buena moto y equipo", indicó la piloto, también campeona del mundo de enduro femenino.
"En el Dakar nunca se sabe, puedes prepararlo bien y tener cualquier problema, pero estoy animada y espero que vaya tan bien como el año pasado", dijo.
Sanz no quiso ponerse metas, porque "el año pasado pretendía quedar entre los 30 primeros y acabé la 16". "Ahora trataré de igualarlo, pero será complicado", dijo.
"Será mi quinto Dakar, vas conociendo a la gente, a los organizadores, y tienes más experiencia, que te da tranquilidad. Sé en qué hay que mejorar", indicó.
Reconoce que su condición de mujer le hace contar con el apoyo del público de Argentina, Chile y Bolivia.
"Les sorprende, pero me animan mucho, pero también a los otros. Son unos apasionados del deporte del motor. Es un evento increíble y hay sitios perdidos donde es el evento más importante del año", dijo.
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