lunes, 4 de mayo de 2015

Suany se estrenará en el Desafío Ruta 40



El viernes 24 de abril, el mismo día en que el Dakar 2016 fue presentado oficialmente en Bolivia, se conoció que Suany Bárbara Suárez Dimetry (Santa Cruz, 30 de agosto de 1991) se convertiría en la primera mujer boliviana en correr la competencia más extrema del mundo, que recorrerá rutas de Perú, Bolivia y Argentina, entre el 3 y 16 de enero.

Está previsto que lo haga en la categoría cuadriciclos, en la que este año brilló Wálter Nosiglia al ubicarse en el tercer lugar de la clasificación general.Espera la confirmación de la ASO (Amaury Sport Organisation), la empresa francesa que organiza el Dakar; en todo caso su padre Leonardo Martínez, que tomará parte en la prueba también en cuadras, está seguro de que le darán el visto bueno.

Para garantizar su participación, sin embargo, debe tomar parte en los tres Dakar Series de este año (pruebas de preparación para el gran evento).El primer reto para Suany será el Desafío Ruta 40, que se correrá en Argentina entre el domingo 17 y el sábado 23. Será también la primera competencia en la que intervenga, pues si bien su afición por los cuadras empezó a los nueve años y conduce desde esa edad, nunca participó de una competencia oficial ni en Santa Cruz ni a nivel nacional.

Luego será el turno del Desafío Guaraní, en Paraguay (20 al 26 de julio); y el Desafío Inca, en Perú (10 al 13 de septiembre).Su afición nació al ver a su padre y también a su hermano Diego, quienes en 2013 participaron en el Dakar. Leonardo sufrió un grave accidente y tuvo que abandonar; mientras que Diego pudo terminar la competencia. Ese año, Suany tuvo la oportunidad de acompañarlos durante algunas etapas, lo hizo también en otras competencias, observó cómo es el movimiento y se encandiló. “Me gustó mucho y ahora tengo la oportunidad de participar”.Sabe de la dureza del Dakar. Es consciente de que muchas veces solo dormirá un par de horas “y también que en muchos días ni siquiera voy a poder bañarme”.

La preparación arrancó hace un par de semanas. “He dejado de comer un poco, porque hay que tener cuidado con la alimentación. Por la mañana y por la noche voy al gimnasio”.

Con su padre practican los sábados. Las lomas de arena en Santa Cruz es uno de los terrenos que má visitan. Más adelante empezará a trabajar en bicicleta y en moto.

En el Desafío Ruta 40 correrá con el cuadriciclo Can Am 800 R con el que corrió su hermano en el Dakar 2013. “Ya está preparado, simplemente hay que hacerle algunas mejoras”.

Es posible que para el Dakar compita con una máquina nueva. “Estamos viendo otra”.

Sus padres (Leonardo y Leddy) le han brindado total apoyo, aunque admite que su mamá tiene temor. “Somos muy creyentes y ella va a rezar por mí para que Dios y la virgen me cuiden”.

No se preocupa del tema económico o logística, porque su padre se encarga de todo.

Leonardo anticipó que junto a un piloto argentino, van a conformar el Team Martínez. “La estructura ya está organizada”.

Para Suany, “el objetivo es terminar la carrera, todo dependerá de Dios y la virgen que me acompañan, ellos son mis guardianes”.

Poco a poco le va tomando el pulso a la navegación

Para los pilotos que participan en el Dakar, uno de los elementos esenciales es tener pleno conocimiento de la navegación, que no es otra cosa que la manera de mantenerse “orientado” en el desarrollo de la carrera, según definen los expertos.

La competencia más extrema del mundo no cuenta con un recorrido determinado, simplemente con puntos de referencia, y para mantenerse en la ruta correcta los pilotos ya sea de autos, cuadriciclos, motos o camiones, tienen a su alcance una serie de ayudas, entre otras están los GPS (sistema de posicionamiento global) precisamente para orientarse.

También están las hojas de ruta (road book), que contienen una simbología que detalla lo que el piloto va a encontrarse en el recorrido de cada etapa (piedras, dunas, giros, ríos, por citar solo algunos)”.

Entre el 10 y 12 de abril, Suany Martínez realizó un curso de navegación en Argentina con los expertos Javier Pizzolito y Daniel Mazzucco.

Fue una experiencia importante para empezar a familiarizarse con lo que se encontrará en las competencias, “pero como aquí no tenemos los GPS y otros aparatos para la navegación, que son fundamentales, no puedo hacer mucho; sin embargo estoy estudiando la simbología, las abreviaturas y tener certeza con lo que nos vamos a encontrar”.


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