sábado, 5 de septiembre de 2015

Cobra fuerza la chance de Tarija en el Dakar 2016



La nueva ruta para el Dakar 2016 todavía es analizada por la ASO (Amaruy Sport Organisation), empresa dueña de la carrera, pero cobra fuerza la posibilidad de que Tarija sea incluida. En contrapartida, aparte de La Paz, Oruro estaría descartado, indicó Juan Carlos Pacheco, presidente de la Febad (Federación Boliviana de Automovilismo Deportivo).

“Es otra opción que entre o que salga (por Tarija), será de acuerdo a lo que haga su (equipo de) logística, ahora están trabajando 1.000 por hora, porque que se baje un país donde es la largada y todo el esquema a seis meses se complica bastante”, manifestó Pacheco.

Esta reorganización de la competencia, que se inicia el 3 de enero y termina el 16 del mismo mes, se debe a la salida sorpresiva de Perú en agosto pasado debido a que su gobierno prefiere reservar dinero para cubrir los posibles daños que cause el fenómeno de El Niño. Esto dejó a Bolivia y a Argentina como únicas sedes de la carrera, por lo que ahora la ASO trabaja a contrarreloj en una nueva ruta.

La largada y la meta será en Argentina y los organizadores buscan una entrada a Bolivia y su respectiva salida y el hecho de que Potosí será nuevamente visitado. Tarija aparece como otra opción para que los participantes de motos, cuadriciclos, motos y camiones no realicen el mismo recorrido al ingresar y salir del país.

Con estos nuevos ajustes La Paz quedó descartada porque queda lejos de Argentina, pero ahora se abrió la posibilidad de que Oruro también esté fuera de la competencia más peligrosa del mundo.

“Si (la carrera) no entra por Desaguadero no van a llegar a La Paz por Villazón, es imposible. Oruro también, porque esto es dentro del ámbito deportivo de un cálculo de lo que es llenar una competencia. Todo está en evaluación, pero hay que darlo por hecho (La Paz y Oruro) están descartados”, explicó el presidente de la Febad.

El viceministro de Turismo, Ernesto Rossell, informó ayer que la ASO mandó opciones de rutas a la Dirección Nacional de Patrimonio y al Ministerio de Medio Ambiente para establecer si en esos lugares no hay áreas patrimoniales y naturales.

“Queremos que la competencia sea de beneficio para las poblaciones, que sus economías se dinamicen pero sin afectar directamente ni su medio ambiente ni su patrimonio cultural”, dijo Rossell, según la agencia de noticias ABI.

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