viernes, 24 de marzo de 2017

Wálter Nosiglia: 'Ser papá me ha enseñado un camino diferente’



La afición por los motores de Wálter (24) y Daniel (22) comenzó a sus tres años, edad en la que ya estaban sobre ruedas, tal vez por seguir a su padre, el piloto profesional del cuadratrack, Wálter Nosiglia (55).

“En un principio, era mi mayor deseo que ellos sigan mis pasos, por eso yo los he incentivado a correr en moto desde niños”... Pero, conforme fueron creciendo y amando la velocidad, la preocupación forma parte de sus días, especialmente en los de entrenamiento y competición. “La verdad es que sufro mucho, me cuesta un montón mientras ellos están corriendo en moto”.

Más allá del riesgo que implica este deporte, Nosiglia valora la dedicación y disciplina de sus hijos porque los ha llevado a tener un estilo de vida saludable. “Creo que esas son las recompensas de tener dos hijos que realmente son impecables”.

Sus apretadas agendas por estudios, trabajos o entrenamientos les permiten compartir muy pocas horas al día. “Lo lindo es que los fines de semana entrenamos juntos y ahí aprovechamos de compartir al 100%”.

Con esta afirmación, el piloto empieza a esbozar una sonrisa. “El ser papá me ha enseñado a seguir un camino diferente al que tenía, porque nunca me habían gustado mucho los niños antes de tener mis hijos”.

Con la llegada de los suyos su vida cambió. “El tenerlos ha cambiado completamente y me ha enseñado muchísimo, porque cuando uno enseña también aprende”.

Es evidente que el Lobo del desierto —como le dicen sus seguidores del Dakar— brilla en los caminos por su pericia sobre cuatro ruedas. Pero, para él, ese brillo no es el que predomina sino el que proviene de su mayor premio: la buena relación en su familia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario