martes, 16 de abril de 2019

El Dakar se va y ello “golpea” a bolivianos

Dos cachetazos para Bolivia en apenas unas horas, tras la confirmación de que el Rally Dakar se va de Sudamérica y toma al Medio Oriente como su “nueva casa”. Por un lado, en el país menguará el frondoso movimiento económico generado por el turismo interno y, por el otro, a los pilotos nacionales se les empieza a debilitar la ilusión de competir en 2020, considerando que el impacto en el bolsillo es importante, sobre todo en materia de logística.

La organización de la contienda mundial, mediante su página web (www.dakar.com) y sus fanpages de las redes sociales, terminó de oficializar lo que ya se venía barajando como un rumor, desde hace unas semanas. La carrera no va más en la región, después de una década (tocó suelo sudamericano en 2009).

“En mi memoria y durante mis experiencias del Dakar, siempre he considerado los conceptos de aventura y exploración como inherentes a este rally único. Estos aspectos me fascinan al mudarse a Arabia Saudita. Estoy convencido de que todos los pilotos y copilotos van animarse por el mismo sentimiento. Es un gran reto enfrentarse a esta página en blanco con innumerables oportunidades”, resumió el francés David Castera, el director del Dakar, mismo que ha sucedido al también galo Etienne Lavigne.

Uno de los que anticipó, a las claras, que no será parte del evento de enero próximo ha sido el cochabambino Danny Nogales.

El corredor de motos no titubeó y anticipó que los gastos de traslado por la vía marítima se engrosarán de tal modo que le será insostenible costearlos. Incluso se animó a calcular que el presupuesto se maximizará hasta en un “300 por ciento ”. “Es una gran tristeza. Llevar logística es difícil. En Sudamerica sí se puede, pero irse al Medio Oriente es complicado para los bolivianos”.

Mi participación está descartada por lo económico”, apuntó el vinteño, que tomó conocimiento de los cambios de escenarios, con antelación, mediante un contacto que trabaja en la Amaury Sport Organisation (ASO).

“Él me dijo algo de que ya habían ofrecido una buena suma de dinero”.

El cruceño Rodrigo Gutiérrez (camioneta), quien en enero pasado tuvo que bajarse del Dakar debido a unos inconvenientes con su documentación (ya se encontraba inscrito para partir), lamentó la determinación. Es consciente de que ello no permitirá que Bolivia cuente con movimiento turístico. Además, la lejanía de la competencia afectará “el nivel” de los pilotos nacionales. De todos modos, su presencia en la versión 2020 del Medio Oriente está encaminada. “Es una pena para Bolivia. Lo veo viable para mí. Estamos preparándonos con carreras en Europa. Hay dos mundiales. El Dakar va a seguir. No pierde el brillo”.

Walter Nosiglia Navarro, quien en enero abandonó la contienda por amor a su hijo (Walter Jr. se accidentó), fue en la misma línea. Puso en duda su presentación, puesto que las condiciones serán más complejas.

“Lo vamos a analizar, viendo si tendré el apoyo con el que he contado siempre para seguir”, confesó, en una entrevista con La Razón.

El motociclista chaqueño Fabricio Fuentes no descartó su participación, pero aseguró que el presupuesto tendrá una “variación considerable”. “Buscaremos el apoyo de autoridades y empresas. Es muy importante para nosotros estar en la carrera más grande del mundo”.

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