Hasta la sexta etapa, donde se ubicó en el séptimo lugar, Nosiglia se situó en la clasificación general en el puesto 14.
FRENOS Y CAÍDAS
El joven piloto nacional declaró que parte de la séptima etapa corrió con problemas en los frenos lo que limitó su rendimiento. “Me quedé sin freno delantero, fue muy difícil, al comienzo había mucho barro y en las champas con la arena me costó muchísimo”.
Según expertos motociclistas, el 75 por ciento del control de una motocicleta se lo realiza con los frenos delanteros, Nosiglia superó el problema gracias a su pericia.
“La verdad es que vine remando lo que más podía y traté de hacerlo lo mejor posible, compensé con el freno trasero y la caja pero nunca es lo mismo”, argumentó.
El piloto sufrió dos caídas pero sin sufrir lesiones. El último percance lo vivió cerca a la meta en Uyuni donde perdió el control de la moto y cayó al barró, él quedó con barro en la mayor parte de su cuerpo. Sin embargo se sobrepuso a la caída y terminó la competencia.
Nosiglia, ayer por la noche, debió reparar los frenos de la máquina sin ayuda de sus mecánicos por tratarse de una etapa “maratón” en la que no puede recibir ayuda de nadie.
Hoy se corre la octava etapa del Dakar entre Uyuni y Tupiza.
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