sábado, 11 de enero de 2014

Uyuni respira Dakar

Con una población aproximada de 20.000 personas, la "Hija Predilecta de Bolivia”, Uyuni, tiene una masiva llegada de turistas que este fin de semana pueden llegar hasta los 50.000 visitantes, según las proyecciones hechas por los organizadores del Rally Dakar 2014.
En los últimos días centenares de fanáticos de la competencia más famosa en el mundo ya han invadido esta ciudad y transitan por la ruta de los aproximadamente 140 competidores (motociclistas) que ingresarán mañana a territorio boliviano, donde nunca antes se había corrido el Dakar. Por ahora, el cielo puede esperar, igual que todos los que avizoran con gran entusiasmo y expectativa el paso de los temerarios competidores.

El jefe del Estado Mayor del Comando en Jefe de las FFAA, general Fernando Aramayo Mercado, junto al jefe de Operaciones del Comando, general René Adolfo Suárez, a tiempo que recorrían desde Colchani las márgenes del salar, recibían más de medio centenar de carpas para ser instaladas en lugares públicos, donde podrán pernoctar cientos de turistas que ya no podrán encontrar alojamiento durante el paso del Dakar 2014.
Según comentó el principal responsable de la seguridad, por parte de las FFAA, se dispuso que 2.500 uniformados refuercen el operativo de seguridad que garantizará la permanencia y también la hospitalidad que Bolivia ofrece a los visitantes.
El jefe militar también informó que al menos cinco vuelos diarios de la empresa Amaszonas trasladan a los turistas nacionales y extranjeros.
La seguridad está además complementada con la operación de helicópteros y hasta aviones de los organizadores que envían desde las naves las señales de radio y televisión a todo el mundo. En tierra, las fuerzas de seguridad contarán con una veintena de vehículos dotados de GPS y de equipos de última tecnología, como los mismos equipos instalados por la Empresa Nacional de Telecomunicaciones en esta población y a lo largo del recorrido.

El operativo de seguridad, una de las prioridades del Estado Plurinacional para hacer de la competencia a su paso por Bolivia el mayor y mejor espectáculo, fue planeado desde hace tres meses por lo menos junto a los ministerios de la Presidencia y de Culturas. Y mientras los uyunenses y los turistas afinan el oído para escuchar el rugir de los motores, las autoridades locales se han movilizado conscientemente para ultimar todos los detalles de la organización, incluida una gran serenata y cena a los competidores el domingo por la noche. En el entretanto, el cielo puede esperar, aunque nunca antes todo, o casi todo, subió por las nubes, para hacer del Rally Dakar 2014 la fiesta inolvidable.

Evo recibirá a los pilotos en Uyuni
El presidente Evo Morales expresó el viernes su admiración por la participaciñon del motociclista boliviano, Juan Carlos "Chavo” Salvatierra, que se posesionó en el puesto 16 de la sexta etapa del Rally Dakar 2014, que se corrió entre Tucumán y Salta, con lo que subió a la casilla 16 de la clasificación general. Aseguró que al igual que Salvatierra, el también boliviano Walter Nosiglia representa "muy bien” al país, por lo que manifestó su deseo de que cuando pisen territorio boliviano estén entre los primeros competidores.
Consultado sobre sí recibirá a los competidores al ingreso de Bolivia, en Villazón, el Presidente dijo que no porque los corredores pasarán de largo, pero los recibirá en Uyuni donde ys comenzó los preparativos.

Punto de vista
Cristhian Riveros M. Periodista
Los precios se han duplicado

Tan sólo por recorrer los 20 kilómetros que separan a Uyuni de la costra salina (Colchani), el desprevenido turista debe desprenderse de 150 bolivianos. De otra forma deberá patear polvo por cuatro horas de ida y otro tanto de regreso. En las últimas 12 horas los precios se han duplicado en este rincón del país.
Hasta el miércoles 9 todavía era posible encontrar un hospedaje por 200 bolivianos la noche. Al día siguiente era prácticamente imposible encontrar una cama por menos de 400 bolivianos. En La Paz, por el mismo monto, uno podría pasar la noche en un hotel boutique de tres estrellas, pero en Uyuni, por estos días, deberá conformarse con una cama de una plaza, un televisor de 12 pulgadas con dos pares de canales y un baño compartido con todo el resto del pasaje.
Algunos hosteleros han cancelado las reservaciones de los turistas que pagaban entre 180 y 200 bolivianos para beneficiar a grupos (sobre todo coreanos) que ofrecen duplicar ese monto para pernoctar.
Comer es otro desafío. Al menos si te fuiste a ver el Dakar con 500 lucas. Un pequeño plato con tripitas fritas cuesta siete bolivianos y es lo más barato que se puede encontrar. Como está fuera de mi presupuesto, debo echar mano a mis reservas estratégicas de pasank’alla y Pilfrut.

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